Tuluá
11-ABR
A una de nuestras capitanas le llegó un chico amigo del papá del bebé, quien lo llevó al punto de oración y le pidió ayuda, ya que su amigo tenía a la novia embarazada y él tenía miedo de que su novia abortara y de cómo enfrentarían esto ante su familia. Son muy jóvenes y dañarian sus estudios. Llevaron a la chica y se hizo el proceso de concientización. Nuestra capitana ayudó a todo este proceso con la familia.
Después, la mamita empezó con controles pero fue hospitalizada por una pequeña infección. En el hospital sacaron unos exámenes y le dijeron a la mamita que su bebé venía con síndrome de down y sugirieron el aborto nuevamente. De nuevo se comunicaron con nuestra capitana y buscaron nuevos diagnósticos, cuando ella ya salió de su hospitalización, con medicos particulares y ecografías especiales como la de traslucencia nucal. La ecografía salió bien, su bebé está bien, y los padres y familia más tranquilos. Un sí a la vida contra muchos pronósticos.
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