Mamás 40, uno de los muchos frutos que ha dado 40 Días por La Vida en el mundo
Para nuestra comunidad de 40 Días por La Vida, no es un secreto que las jornadas de oración pública, pacífica, y de ayuno durante 40 días y noches frente a centros de aborto, son un acto de penitencia, reparación y sacrificio; y que no siempre asumir estas jornadas es fácil.
Muchos de nosotros, tenemos en nuestras vigilias de oración un entorno complicado, ya sea por la inseguridad del barrio, las inclemencias del clima o la contaminación del aire por la congestión del tráfico que por ahí transita. En muchos casos, también recibimos en nuestras vigilias, las visitas de los grupos pro aborto que quieren atacarnos o, en otras palabras, silenciarnos.
A veces tampoco es fácil tomar la decisión de salir de la casa e ir a rezar públicamente; sin embargo, hay momentos en que Dios nos permite ver algunos frutos y con estos, tomar aire y fuerza para continuar.
Este es el caso del proyecto Mamás 40, y de la Casa 40, ubicado en Teusaquillo, un barrio de Bogotá, la capital de Colombia. Este proyecto surge como respuesta la oración, el ayuno y la penitencia de muchas personas que querían hacer algo contra el aborto pero no sabían qué hacer ni cómo enfrentarlo.
Esta casa es como un oasis en el desierto, pues está ubicado en el barrio Teusaquillo, un barrio tradicional de la ciudad de Bogotá cuyas casas residenciales fueron construidas hace 50 años al estilo inglés, pero que hoy en día se ha convertido en el epicentro de los abortos, pues en su calle principal, que es la calle 34, hay más de 30 centros de aborto, algunos clandestinos, y otros amparados por la ley, como Oriéntame y Profamilia. Pertenecen a la Red Internacional de la IPPF, por sus siglas en inglés, lo que significa Federación internacional de la paternidad planeada, en Estados Unidos conocida como “Planned Parenthood”.
Un negocio aterrador pues se trafica con una mujer angustiada y desesperada que está pensando pagar a alguien para que acabe con la vida de su hijito que se forma en su vientre. En este barrio, los promotores del aborto ganan el 10% de comisión por cada bebé abortado. La Casa 40, en donde se desarrolla el proyecto Mamás 40, es una casa esquinera, blanca y muy iluminada; una casa llena de vida.
En esta casa, frecuentada cada día por voluntarios de 40 Días Por La Vida, las mujeres se dan cuenta de que no están solas, y en el último minuto no entran al centro de abortos para matar a sus bebés, sino que se dejan acoger por el amor de Dios que reciben a través de los voluntarios de nuestras vigilias. Entonces son bienvenidas para iniciar un proceso en el que se busca ayudarles a transformar su maternidad en crisis en una maternidad tranquila y feliz.
Este proceso se logra con el apoyo de psicólogos y, sobretodo, de la comunidad de voluntarios de 40 Días Por La Vida.
Las mujeres que, estando en crisis, le dicen si a la vida, reciben un acompañamiento durante todo su embarazo, el cual les permite recibir herramientas para poco a poco recuperar el autoestima, la fe y la fuerza para continuar con sus embarazos.
El proyecto está diseñado para trabajar en las madres las áreas emocional, psicologica, física y espiritual. Se realizan charlas semanales con diferentes temas que tienen esta secuencia y, además, se les ofrece de manera gratuita un apoyo psicológico semanal.
Las mujeres no viven en esta casa pero asisten dos veces a la semana a una terapia psicológica, y participan en las charlas. Con el tiempo se ha conformado una comunidad de mujeres que están viviendo la misma situación, y que entre ellas se apoyan, así como también reciben el apoyo de los voluntarios que quieren no sólo darles cariño y amistad, sino ofrecerles opciones laborales y también ayudarles de manera material con sus embarazos.
Con el apoyo de tantas personas se ha logrado construir un “roperito” que les ofrece objetos de aseo, ropa y juguetes usados, pero en buen estado, para sus bebés, a los que tienen acceso por un valor solidario. Una vez al mes, y con el apoyo del Banco de Alimentos de Bogotá, ellas tienen acceso a mercados también por un valor solidario.
En la Casa 40 las mujeres están invitadas a celebrar fechas especiales como el día de la madre, los cumpleaños, la Navidad, el día de la mujer y también reciben después de cada Vigilia y cuando están en plena crisis por sus embarazos la invitación a participar del Baby Shower, que es una fiesta en la que se celebra la vida, se les invita a almorzar y se les dan regalos para sus bebés. También se les invita a compartir con los voluntarios de 40 Días por La Vida y, si ellas quieren, reciben la bendición para sus vientres.
El proyecto también ha tenido una línea de emprendimientos que busca enseñarles un oficio con el cual puedan salir adelante por sus propios medios. La idea no es hacerlas dependientes de la ayuda, sino enseñarles a pescar. Dentro de los emprendimientos que se han realizado está la costura, la bisutería, la chocolatería y la manicura.
En este lugar de vida se respira paz y se encuentra esa alegría que sólo trae saber que se está obrando según la voluntad de Dios, y es que la voluntad de Dios es que seamos uno como El es uno con el Padre; que nos amemos los unos a los otros y nos ayudemos, y que protejamos ese tesoro que es el milagro de la vida.
De corazón a corazón, el proyecto Mamás 40 está cambiando muchas vidas y está llenando muchos corazones de amor y de esperanza.
En el año 2015, cuando se hizo la primera vigilia de 40 Días por La Vida en Bogotá, fueron 12 los bebés salvados de ser abortados. Desde entonces en cada vigilia se atienden aproximadamente 25 mujeres de las cuales no todas continúan el proceso, pero si la mayoría.
Para darles una mejor atención, están organizadas en cuatro grupos: las mamás gestantes, las lactantes, las mamás que tienen sus bebés en brazos y las mamás de los niños grandes. ¡Es hermoso saber que los primeros bebés salvados hoy en día tienen 8 años de edad!
Además, este proyecto funciona no sólo en los tiempos de vigilia, sino durante todo el año y en promedio cada semana se acercan 6 mujeres pidiendo ayuda. En total se han registrado más de 1 000 mujeres atendidas durante los pasados 9 años.
Mamás 40 es sólo uno de los miles de frutos que ha dado 40 Días por La Vida en el mundo entero.
¡Ahora tú puedes apoyarlo!
Conoce más sobre este proyecto en sus redes sociales.
Texto: Pamela Delgado C
